Acompañamiento tras el divorcio

De manera objetiva, el divorcio es el proceso por el cual damos por finalizado un matrimonio. Está incluido dentro de las experiencias psicológicas de las pérdidas y como tal supone una de las situaciones más intensas y estresantes que la persona puede experimentar a lo largo de su ciclo vital.

Separarse o divorciarse es mucho más que dejar de convivir con la pareja que un día escogimos. No sólo hay que tomar la decisión, asumirla y hacerse a la idea... este es el primer paso. A partir de este momento comienza a dibujarse un nuevo camino, con puertas que se abrirán y se cerrarán y que tendremos que saber gestionar de la mejor manera.

El momento inminentemente posterior al divorcio es concebido como un periodo de crisis personal, donde el individuo debe enfrentarse a retos y asumir riesgos. Periodo en el que, el sentir subjetivo de que todo está cambiando, es constante. Las dudas, las inseguridades y la ambivalencia forman parte de la cotidianidad de esta primera etapa después del divorcio. 
Teniendo presente esta breve definición, la terapia de acompañamiento post divorcio pretende hacer de guía y apoyo emocional en este camino que la persona divorciada debe recorrer.

"La única manera de vencer una tentación es caer en ella"
Oscar Wilde.